Argüelles Salaverría, Inés (1948-VVVV).
Diplomática española nacida en Madrid en 1948, que ocupó diversos cargos de responsabilidad en la Administración del Estado y en distintas instituciones de ámbito cultural y que en 2001 asumió la gerencia del Teatro Real.
Ingresó por oposición en la carrera diplomática en 1979, después de concluir la licenciatura en Ciencias Políticas por la Universidad Complutense de Madrid y la diplomatura en Estudios Internacionales de la Escuela Diplomática. Sus primeros destinos profesionales estuvieron ligados al Ministerio de Asuntos Exteriores como directora jefe en la Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales y en la Secretaría Diplomática. También fue vocal asesora en la Secretaría de Estado para las Relaciones con las Comunidades Europeas y directora de coordinación de Asuntos Bilaterales con América del Norte y ocupó la segunda jefatura en la Embajada de España en El Salvador y la Secretaría General del Instituto Hispanoárabe de Cultura.
Después de ejercer durante algunos años la subdirección en la Secretaría General de la Casa Real y la gerencia de la Real Academia Española, asumió un nuevo reto profesional en el ámbito privado como subdirectora general del Banco Central Hispano, con responsabilidad en el programa de patrocinio y mecenazgo de la entidad financiera.
En mayo de 2000 tomó posesión de la Dirección General de Cooperación y Comunicación Cultural, cargo para el que fue designada por la ministra de Educación y Cultura, Pilar del Castillo, y que abandonó a finales del año siguiente, cuando se propuso de forma oficial su candidatura para sustituir al dimitido Juan Cambreleng en la Gerencia del Teatro Real. Aurea María Roldán, letrada del Consejo del Estado, cubrió su puesto en el Ministerio y, el 26 de diciembre de 2001, Inés Argüelles tomó posesión de su nuevo cargo, después de recibir la confirmación del Patronato de la Fundación Teatro Lírico.
Entre las primeras iniciativas de su gestión, puso en marcha un plan de viabilidad para acabar con el déficit de la institución en cuatro años y promovió algunas experiencias novedosas, como la creación de un abono conjunto de ópera para asistir durante la temporada 2002-2003 a dos representaciones en el Teatro Real y a otras dos en el Liceo de Barcelona.
