Alejandro V, Papa (1409-1410).
Nació en Candía (Italia). Ocupó el solio pontificio de 1409 a 1410. Fue elegido a la muerte de Gregorio XII, por el conciliábulo de Pisa para acabar con el Cisma de Occidente, lo que no pudo conseguir. Se llamaba Pedro Filargo. En su niñez vivió mendigando hasta que lo recogió un fraile franciscano. Fue profesor en París, obispo en Vicenza en 1402, arzobispo de Milán y cardenal en 1404. Su elección, en vez de terminar el cisma, lo aumentó y Alejandro tuvo que fijar su residencia en Bolonia, dándose el caso de existir tres papas a la vez. Fue un erudito y de carácter bondadoso. Fue preparando el terreno para ir reformando la iglesia paulatinamente pero los acuerdos del concilio de Pisa no obtuvieron la aprobación general y sus planes fracasaron. Concedió autorización a los franciscanos para predicar, confesar y recibir diezmos contra la voluntad de los obispos, lo que revocó Juan XXIII. Murió en Bolonia el 4 de mayo de 1410. Le llamaron el antipapa de Pisa. Su sucesor fue Juan XXII.
