Alberca Lorente, Luisa (1920-VVVV).

Escritora y periodista española, nacida en Alcázar de San Juan (Ciudad Real) en 1920. En algunos manuales y repertorios de autores dramáticos españoles, el nombre de esta escritora se considera, por error, pseudónimo del escritor y periodista Guillermo Sautier Casaseca, con el que colaboró Luisa Alberca en la redacción de algunos de sus seriales radiofónicos y obras teatrales.

Aunque mostró desde joven una acusada vocación humanística, su formación académica y su inicial andadura profesional se inclinó por otros derroteros. Así, tras haber cursado estudios en la Escuela de Comercio de Alicante, ingresó por oposición en el Cuerpo General Administrativo del Ejército del Aire, al que perteneció hasta que cumplió los treinta años de edad. A partir de entonces (1950), pasó a formar parte de la plantilla de la emisora Radio Madrid, donde se reveló como una excepcional creadora de seriales dramáticos, algunos de los cuales, por su interés y calidad literaria, pronto pasaron a ser editados en forma de novela o a ser representados como función teatral. Entre estos títulos impresos o llevados a escena, sobresalen Lo que nunca somos (1952), Lo que nunca muere (1953), La segunda esposa (1956), En nombre del hijo (1957), La otra justicia (1960) e Historia de una mujer: Rosa María (1964).

A partir de 1957, ya convertida en una de las figuras más populares de la difusión radiofónica española, Luisa Alberca Lorente comenzó a trabajar en la Red de Emisoras del Movimiento, donde continuó creando numerosos espacios dramáticos.

Estrenada el día el 7 de agosto de 1953, Lo que nunca muere (1953) es una comedia escrita en colaboración con el susodicho Guillermo Sautier Casaseca, y resultante de la adaptación de un serial radiofónico compuesto por la autora manchega. Su siguiente estreno teatral, verificado el 2 de abril de 1954, estuvo protagonizado por La última dicha, una comedia en tres actos en cuya redacción también intervino el mencionado compañero de Luisa Alberca Lorente. Aquel mismo año de 1954 (concretamente, el día 27 de junio, en el Teatro Liceo de Guadalajara), tuvo lugar el estreno de El serial de las 8'30, un breve apropósito compuesto de un solo acto, centrado en los entresijos del mundillo radiofónico y escrito, también, en colaboración con Guillermo Sautier. Y al cabo de poco más de un mes, la escritora manchega asistió al estreno de otra obra suya, esta vez puesta en escena en el Teatro Principal de Alicante, el día 1 de agosto de 1954. Se trataba de la pieza titulada Un arrabal junto al cielo, una comedia compuesta de tres actos, en cuya elaboración también había intervenido el hasta entonces inseparable compañero literario de la autora. Esta obra gozó de una extraordinaria acogida por parte de los espectadores -si bien pasó inadvertida para la crítica especializada-, lo que motivó su reestreno en Madrid al cabo de dos años, el día 12 de julio de 1956. Fue entonces cuando el escritor menorquín Alfredo Marqueríe, que, a la sazón, se encargaba de la crítica teatral en el diario ABC, publicó en el rotativo madrileño del día posterior al del estreno las siguientes palabras: "Un arrabal junto al cielo pierde su aire melodramático y se convierte en una sucesión de escenas de dos personajes -defecto característico de quienes no dominan la técnica teatral- que, si bien tienen una loable intención moralizadora y adoctrinadora, resultan pesadas y farragosas, cuando no sensibles y gimoteantes [...]. Ignoramos por qué razón ha sido llevado al teatro".

Ya un año antes, a raíz del estreno en el Teatro Calderón de Madrid, el día 25 de noviembre de 1955, de La segunda esposa (otra comedia escrita al alimón por Luisa Alberca y Guillermo Sautier), el escritor mahonés se había despachado a gusto contra ambos autores, desde las mismas páginas del diario ABC: "En fin, La segunda esposa ni por su tema, ni por su desarrollo, ni por su diálogo pedestre y vulgar, cuando no engolado y cursi; ni por su lacrimosa sensiblerías, puede ser tomada en serio". Sin embargo, la obra también había merecido el aplauso del público, que en el momento del estreno aún tenía memoria del exitoso serial radiofónico en que estaba basada esta pieza.

El 29 de enero de 1956 se estrenó, en el Teatro Municipal de Gerona, la obra titulada Sin celda, una comedia en tres actos que había sido escrita por Luisa Alberca Lorente, esta vez en colaboración con un nuevo compañero de andanzas literarias, F. Martínez Beltrán. Esta pieza dramática pasó prácticamente inadvertida para la crítica y el público, pero no ocurrió lo mismo con la siguiente entrega teatral de la escritora manchega, titulada En nombre del hijo, y basada también en uno de los seriales radiofónicos que más fama habían reportado a la autora. Se trata de una comedia dramática compuesta de dos actos -el primero de los cuales está constituido por cinco cuadros, y el segundo por dos-, cuyo estreno se verificó en el Teatro Fuencarral de Madrid, el día 29 de marzo de 1957, a cargo de la compañía "Teatro Radiofónico". Para su adaptación al escenario teatral, Luisa Alberca volvió a contar con la colaboración de Guillermo Sautier Casaseca, quien, al parecer, supo sacar provecho escénico de los abundantes recursos lacrimógenos que abundan en la pieza.

Finalmente, ambos autores estrenaron en Madrid, en 1958, dos nuevas muestras de su teatro popular y sensiblero, apto tal vez para ser interpretado a través de los micrófonos de la radio, pero de muy escasa calidad a la hora de ser llevado a las tablas. La primera de estas obras. titulada La dama verde, es una comedia dramática dividida en dos partes (precedidas, a su vez, de un prólogo), que fue estrenada en el Teatro Cómico de Madrid el día 11 del mencionado año. La segunda, puesta en escena el 25 de agosto de 1958 en el Teatro Fuencarral de Madrid, bajo la dirección escénica de Rafael Beltrán, es un melodrama titulado La casa del odio.

Bibliografía.

- GALERSTEIN, Carolyn L. Women writes of Spain (Nueva York: Greenwood Press, 1986).

- HORMIGÓN, Juan Antonio (dir.) Autoras en la Historia del Teatro Español (1500-1994). (Madrid: Publicaciones de la Asociación de Directores de Escena de España, 1996). 2 Vols.